
La sesión del Senado del 14 de mayo de 2025, que marcó el hundimiento de la consulta popular impulsada por el Gobierno de Gustavo Petro, terminó envuelta en una controversia explosiva.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, desató una tormenta política al denunciar públicamente un presunto fraude en el conteo de votos, presentando como evidencia un video que, según su interpretación, muestra al secretario del Senado invalidando un voto crucial a favor de la iniciativa.
Este incidente, sumado a las acusaciones contra el presidente del Senado, Efraín Cepeda, ha encendido las alarmas sobre la transparencia del proceso legislativo y ha profundizado la ya tensa relación entre el Ejecutivo y el Legislativo.
Contexto
La consulta popular, que buscaba someter al escrutinio ciudadano doce preguntas fundamentales sobre reformas laborales y otras materias de calado social, representaba una apuesta clave del gobierno de Gustavo Petro.
Tras el revés sufrido por la reforma laboral en la Comisión Séptima del Senado en marzo de 2025, este mecanismo se presentaba como una vía para sortear la resistencia legislativa y dar voz directamente a la ciudadanía sobre temas que el Ejecutivo considera prioritarios. Sin embargo, la votación en la plenaria del Senado truncó estas esperanzas al registrarse 49 votos en contra y 47 a favor de la consulta.
La bomba de Benedetti:
La aparente derrota en las urnas se tornó en un escándalo de proporciones cuando el ministro del Interior, Armando Benedetti, recurrió a su cuenta de X (@AABenedetti/X) para lanzar una grave acusación.
A través de un video, Benedetti señaló directamente al secretario general del Senado de haber manipulado el conteo al invalidar un voto que favorecía la consulta popular.
Según el ministro, esta acción habría sido determinante para cambiar el resultado final, transformando un empate técnico inicial de 48-48 en la derrota por dos votos.
«Lo de hoy fue fraudulento. Se hundió la Consulta Popular de forma fraudulenta», sentenció Benedetti, anunciando además la presentación de una denuncia penal contra los responsables.
Acusaciones contra la mesa directiva:
El ministro también apuntó directamente al presidente de la corporación, el senador Efraín Cepeda, acusándolo de haber cerrado de manera prematura el registro de votación al percatarse de una tendencia favorable a la aprobación de la consulta.
Según Benedetti, esta maniobra impidió que se consolidara una mayoría a favor de la iniciativa gubernamental, comprometiendo la equidad del proceso.
Estas acusaciones, provenientes de un alto funcionario del Ejecutivo, han puesto bajo la lupa la actuación de la mesa directiva del Senado en un momento crucial para la agenda del Gobierno.
Tensión en el Recinto: Pizarro interviene en medio del caos
El conteo de votos no solo se caracterizó por la ajustada diferencia en el resultado, sino también por un ambiente cargado de tensión.
Testigos presenciales y reportes de prensa dan cuenta de empujones y fuertes intercambios verbales entre congresistas de diferentes bancadas.
La situación llegó a un punto crítico cuando el ministro Benedetti, visiblemente alterado por lo que consideraba una manipulación flagrante, intentó confrontar físicamente al secretario del Senado. Fue necesaria la intervención de la senadora María José Pizarro, quien logró contener al ministro y retirarlo del área donde se realizaba el escrutinio.
El rol de Pizarro en este tenso momento, actuando como una suerte de mediadora, añade una capa de complejidad a un evento ya de por sí polémico, aunque hasta el momento no se han conocido declaraciones públicas de la senadora sobre lo sucedido.
Petro responde con indignación y llamado a la movilización
El presidente Gustavo Petro no tardó en reaccionar a los eventos en el Senado, respaldando las denuncias de su ministro y elevando el tono de la confrontación.
A través de su cuenta de X, el mandatario calificó el proceso de votación como un «fraude» y denunció lo que considera un intento de silenciar la voluntad popular.
«Estamos ante un fraude y el pueblo debe decidir», afirmó Petro, convocando a las centrales obreras, organizaciones campesinas, juntas de acción comunal y movimientos indígenas a reunirse de manera urgente para definir las acciones a seguir.
En un gesto que anticipa posibles movilizaciones, Petro también instó al ejército y a la policía a garantizar la protección de los manifestantes, lo que sugiere una respuesta gubernamental contundente ante lo que se percibe como una grave irregularidad institucional.
El silencio del Senado y la fractura política
Hasta el momento de esta publicación, no se ha registrado una respuesta oficial por parte del presidente del Senado, Efraín Cepeda, a las serias acusaciones formuladas por el ministro Benedetti.
Este silencio por parte de la mesa directiva de la corporación legislativa deja abierta la puerta a diversas interpretaciones y no hace más que alimentar la incertidumbre y la controversia en torno al proceso de votación.
Por otro lado, la oposición política, liderada por partidos como el Centro Democrático y Cambio Radical, ha celebrado la derrota de la consulta popular, viéndola como un revés significativo para la agenda reformista del gobierno Petro.
Esta marcada división en el espectro político colombiano subraya las profundas tensiones existentes entre el Ejecutivo y el Legislativo, especialmente en lo que respecta a la implementación de reformas estructurales.
Es importante recordar que la relación entre Armando Benedetti y Efraín Cepeda no ha estado exenta de fricciones en el pasado.
Se han registrado desencuentros públicos y acusaciones mutuas sobre la gestión de la agenda legislativa y supuestas presiones políticas.
Estos antecedentes podrían influir en la percepción de las acusaciones actuales, aunque la presentación de un video como evidencia por parte del ministro Benedetti añade un elemento concreto a la denuncia.
El incidente se produce, además, en un momento en que el Gobierno busca acelerar la aprobación de sus reformas antes de la conclusión del actual periodo legislativo, lo que añade urgencia y sensibilidad a la situación.
Implicaciones legales y un futuro incierto
La denuncia de un presunto fraude en la votación de la consulta popular podría tener importantes implicaciones legales.
La Fiscalía General de la Nación podría iniciar una investigación formal a partir de la denuncia penal anunciada por el ministro Benedetti, lo que podría derivar en sanciones para los responsables si se confirman las irregularidades.
Desde el punto de vista político, este escándalo profundiza la crisis de confianza entre el Ejecutivo y el Legislativo, dificultando aún más la posibilidad de construir consensos para avanzar en la agenda de reformas del Gobierno.
La respuesta del Senado ante estas graves acusaciones será crucial para determinar el rumbo de este conflicto y su impacto en la estabilidad política del país.
La convocatoria a la movilización popular por parte del presidente Petro abre un interrogante sobre la posible reacción de la ciudadanía y la forma en que las instituciones manejarán esta creciente tensión.
En conclusión, el incidente ocurrido en el Senado durante la votación de la consulta popular no solo representa un revés para las aspiraciones del Gobierno, sino que también ha desatado una grave crisis institucional marcada por acusaciones de fraude, un video incriminatorio y un llamado a la movilización social.
La forma en que se desarrollen las investigaciones y la respuesta de los diferentes actores políticos serán determinantes para el futuro de las relaciones entre los poderes del Estado y para la estabilidad democrática de Colombia.
Por: Ricardo Collazos