
¿Te quedaste varado por una llanta pinchada? ¡No entres en pánico! Con esta guía de 10 pasos, cambiar la llanta será pan comido.
Sigue estas instrucciones sencillas y vuelve a la carretera en minutos.
1. Seguridad primero: ¡Frena y señaliza!
Detente en un lugar plano y seguro, lejos del tráfico. Activa las luces de emergencia y coloca el freno de mano firmemente.
Si tienes triángulos de seguridad, colócalos detrás y delante del vehículo para alertar a otros conductores.
2. Reúne tus herramientas y el repuesto
Localiza la llanta de repuesto , la cruceta (para aflojar los pernos), el gato hidráulico (para levantar el coche) y, si es necesario, el manual del propietario (para ubicar puntos de elevación seguros).
3. Afloja los pernos (¡sin quitarlos!)
Con la cruceta, gira los pernos de la llanta pinchada en sentido contrario a las agujas del reloj.
No los quites por completo, solo aflójalos media vuelta o una vuelta.
Esto es más fácil con el coche aún en el suelo.
4. Levanta el carro con el gato*
Consulta el manual del propietario para encontrar los puntos de elevación designados en el chasis.
Coloca el gato firmemente en uno de estos puntos y gíralo (generalmente en sentido horario) para levantar la llanta pinchada del suelo lo suficiente para retirarla.
Asegúrate de que el coche esté estable antes de continuar.
5. Retira los pernos y la llanta pinchada
Ahora sí, desenrosca por completo los pernos y guárdalos en un lugar seguro (como la tapa del centro de la rueda para no perderlos).
Sujeta firmemente la llanta pinchada y tira de ella hacia afuera.
Puede que necesites moverla un poco para liberarla del cubo.
6. Coloca la llanta de Repuesto
Alinea los orificios de la llanta de repuesto con los pernos del cubo.
Empuja la llanta hasta que quede ajustada contra el cubo.
7. Aprieta los pernos (en cruz)
Coloca los pernos y apriétalos a mano.
Luego, con la cruceta, apriétalos en forma de cruz o estrella (aprieta uno, luego el opuesto, y así sucesivamente).
Esto asegura que la rueda se asiente de manera uniforme.
No los aprietes al máximo todavía.
8. Baja el coche y aprieta los pernos finales
Gira el gato en sentido contrario para bajar el coche hasta que la llanta de repuesto toque el suelo.
Ahora, aprieta los pernos con la llave de cruceta lo más fuerte que puedas.
9. Guarda la llanta pinchada y las herramientas
Coloca la llanta pinchada, el gato y la cruceta de nuevo en su lugar.
Asegúrate de que todo esté bien sujeto.
10. ¡Verifica la presión y acude a un montallantas!
Tan pronto como sea seguro, verifica la presión de la llanta de repuesto y ajústala si es necesario.
Recuerda que la llanta de repuesto suele ser temporal, así que acude a un Montallantas lo antes posible para reparar o reemplazar la llanta dañada.
Por: Ricardo Collazos.