
En una alocución que dejó a más de uno con la boca abierta y las cejas en la nuca, Petro se lanzó con todo contra su propio Ministerio de la Igualdad, revelando una telenovela digna de Netflix con peleas internas, exilios parisinos y defensas a ultranza de personajes que, bueno, digamos que no son los típicos funcionarios de corbata.
La batalla campal en el reino de la igualdad
«Lo que hay es una pelea interna en el Ministerio de Igualdad», soltó Petro, como quien revela el chisme más jugoso del barrio.
Mientras la vicepresidenta Francia Márquez intenta navegar su buque insignia, parece que en las entrañas de su ministerio se libra una guerra silenciosa, o no tan silenciosa, a juzgar por el ventilador presidencial.
Pero la cosa se puso mejor cuando Petro acusó al Ministerio de «echar a los funcionarios que en Bogotá Humana demostraron, a riesgo, porque tuvieron que exiliarse y tuvieron que prostituirse en París su lucha».
¡Paren todo! ¿Exiliados en París? ¿»Prostituirse su lucha»? Esto suena más a una trama de espionaje con tintes dramáticos que a un comunicado oficial.
¿Será que el Ministerio tiene un club de fans que se fue de Erasmus y ahora los están castigando por su espíritu libre?.
Y como en toda buena historia, tenemos a los personajes que el héroe defiende a capa y espada.
Primero, Petro sacó a relucir a un «actor porno que creó el sindicato de trabajadores sexuales del Bois de Boulogne en París».
Sí, leyeron bien. El presidente se puso su capa de defensor de la diversidad y sentenció: «Nadie que sea negro me va a decir que hay que excluirlo».
Y para rematar, nos contó que estuvo «hablando con ellos de Marx», porque claro, nada como una charla filosófica con los héroes de la lucha social para enderezar el rumbo de la nación.
Luego, apareció «Florián», un personaje al que Petro le había prometido un viceministerio y que ahora, según el presidente, lo estaban «echando a un dirigente que lucha por la igualdad humana en el mundo, perseguido en Colombia».
¿Perseguido por quién? ¿Por los villanos del Ministerio? ¿O por los que no entienden que la lucha por la igualdad puede tener orígenes… poco convencionales para la burocracia tradicional?
El drama de la «Webcam»: De la esclavitud moderna al gabinete presidencial
Y cuando pensábamos que la cosa no podía ponerse más surrealista, Petro nos sorprendió con el caso de «la señora Alejandra Umaña» (conocida en el mundo como Amaranta Hank), a quien «ni la dejaron trabajar» por su pasado como «webcam». El presidente, con una lógica aplastante (o al menos, peculiar), argumentó que «solo alguien que ha sufrido de lo que pasa con la webcam» puede abordar el problema, calificando la práctica como «una nueva esclavitud». ¡Imaginen la cara de los asesores! De pronto, la experiencia en la industria del entretenimiento para adultos se convierte en un requisito sine qua non para entender las problemáticas sociales.
En fin, la alocución presidencial dejó más preguntas que respuestas.
¿Será que el Ministerio de la Igualdad se convertirá en un reality show? ¿Quién será el próximo personaje sorpresa que el presidente saque a relucir en su cruzada por la igualdad? Lo que sí es seguro es que el gobierno Petro no nos da un respiro, y entre escándalo y escándalo, nos está dando material para risas, memes y, por supuesto, mucha polémica. ¡Manténganse sintonizados!
Por: Ricardo Collazos.