
La Selección Colombia entra en la recta final de las Eliminatorias al Mundial 2026 con dos compromisos de máxima tensión. El combinado nacional dirigido por Néstor Lorenzo se medirá el próximo 4 de septiembre a Bolivia en Barranquilla y cerrará el camino clasificatorio el 9 del mismo mes frente a Venezuela en Maturín. Dos partidos que definirán de manera directa la suerte del equipo tricolor en su aspiración por asegurar un cupo a la cita mundialista en Norteamérica.
La importancia de estos encuentros hace que cada detalle en la preparación sea decisivo, sobre todo en el apartado físico de las figuras más influyentes del plantel. Dentro de ese panorama, uno de los nombres que genera mayor expectativa es el de Juan Fernando Quintero, un jugador que siempre ha marcado diferencias cuando viste la camiseta del seleccionado, pero que hoy se encuentra en un escenario lleno de incertidumbre.
El mediocampista de River Plate había llegado a este tramo de la temporada en un nivel aceptable, siendo protagonista en varias jornadas del fútbol argentino. Su capacidad para desequilibrar con la zurda y su inteligencia en el último pase lo mantienen como una de las cartas predilectas de Lorenzo para darle fluidez al ataque colombiano. Sin embargo, la ilusión alrededor de su presencia podría complicarse en los próximos días debido a inconvenientes físicos.
A partir de la última jornada en el torneo local argentino, surgió una alerta preocupante para el entorno de la Selección. Quintero presentó molestias en su rodilla izquierda durante el duelo frente a Godoy Cruz, motivo por el cual debió ser sustituido antes de lo esperado.
El volante abandonó el campo visiblemente afectado y encendió las alarmas en River y en la propia Federación Colombiana de Fútbol, ya que la lesión se presenta en un momento crucial de la temporada. Su evolución médica en las próximas horas será clave para determinar si podrá estar disponible para los compromisos ante Bolivia y Venezuela.
El riesgo de perder al talentoso creativo no es menor, ya que Colombia necesita variantes claras en la construcción de juego. La ausencia de Quintero significaría prescindir de un futbolista que aporta pausa, precisión en balones filtrados y efectividad en la pelota quieta, virtudes que se vuelven determinantes en partidos cerrados como los que se prevén en esta última doble jornada. Lorenzo tendría que ajustar su esquema y evaluar opciones como Jorge Carrascal o Yaser Asprilla, quienes podrían ocupar ese rol si la evolución del antioqueño no es favorable.
A la posible baja de Quintero se suma otro interrogante importante: James Rodríguez. El capitán histórico del equipo no atraviesa su mejor presente en el fútbol mexicano, donde con el León ha tenido muy poca continuidad. La falta de ritmo competitivo genera preocupación, pues aunque James siempre ofrece jerarquía y liderazgo, su estado físico no garantiza que pueda ser titular en ambos compromisos.
Con dos figuras en duda, el panorama se complica para Colombia. La doble fecha no admite errores y cualquier ausencia obligará a Lorenzo a replantear su estrategia. En caso de no contar con Quintero ni James, el entrenador deberá confiar plenamente en la nueva generación de mediocampistas, quienes tendrían la responsabilidad de mantener vivo el sueño mundialista.
El futuro inmediato de Quintero será decisivo no solo para River, sino también para todo un país que espera contar con su talento en el momento más determinante de la eliminatoria.
Por: Antena 2 – Jhon Edison Sandoval Castro