
Colombia amaneció hoy de luto. El senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay murió en la mañana de este lunes en la Clínica Fundación Santa Fe de Bogotá, donde permanecía hospitalizado desde el 7 de junio, cuando fue víctima de un atentado durante un acto de campaña en el barrio Modelia.
Uribe Turbay, de 39 años, recibió un disparo en la cabeza perpetrado por un menor de edad que fue aprehendido en el lugar. El proyectil le provocó un sangrado intracerebral agudo y un edema cerebral severo. Durante 66 días, su estado de salud fue crítico y aunque presentó breves signos de mejoría, las complicaciones neurológicas y orgánicas derivaron en su fallecimiento.
Una trayectoria marcada por el servicio público
Nacido el 6 de enero de 1986 en Bogotá, Miguel Uribe Turbay era hijo de la periodista Diana Turbay, asesinada en 1991 durante un fallido operativo de rescate, y nieto del expresidente Julio César Turbay Ayala (1978-1982).
Estudió Derecho en la Universidad de Los Andes, donde también cursó una Maestría en Políticas Públicas, y realizó estudios de liderazgo y gobierno en la Universidad de Harvard.
Su carrera política inició como concejal de Bogotá (2012-2015), siendo uno de los más jóvenes en ocupar el cargo. Luego fue secretario de Gobierno de la capital (2016-2018) durante la administración de Enrique Peñalosa. En 2019 aspiró a la Alcaldía Mayor, y en 2022 fue elegido senador de la República por el partido Centro Democrático.
En 2025 oficializó su aspiración presidencial, presentándose como un defensor de la seguridad ciudadana, la institucionalidad y la economía de mercado.
Un crimen que sacude a la política nacional
El atentado del 7 de junio causó conmoción en el país y reavivó el debate sobre la violencia política. El presunto autor fue aprehendido y se encuentra bajo custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), mientras avanzan las investigaciones para establecer posibles determinadores del ataque.
Durante su hospitalización, se emitieron varios partes médicos que reflejaban un estado de salud fluctuante, e incluso se difundieron noticias falsas sobre su muerte que fueron desmentidas por la familia y el equipo médico.
Miguel Uribe Turbay deja a su esposa María Claudia Tarazona, tres hijastras y un hijo de cuatro años. Su familia ha pedido respeto por su intimidad y confirmó que los detalles de las exequias se darán a conocer en las próximas horas.
Su muerte se suma a la larga lista de líderes políticos víctimas de la violencia en Colombia y plantea un nuevo desafío para garantizar la seguridad de quienes ejercen la labor pública.