
Las cigüeñas parecen haber tomado un vuelo más corto en 2024. Los datos del DANE revelan un descenso sin precedentes en la natalidad colombiana, con menos de medio millón de nacimientos vivos (445.011).
Esta caída del 13,7% respecto a 2023 pinta un panorama demográfico que se desinfla como un globo pinchado.
¿Casanare a contracorriente?
En Casanare, la tendencia a la baja también se siente, aunque con menor intensidad.
La región experimentó una disminución del 6,5% en los nacimientos entre 2022 y 2023. ¿Significa esto que Casanare es una isla demográfica? No exactamente, pero su ritmo de descenso es más pausado que el del resto del país.
El Bolsillo Aprieta, la Cuna se Vacía: ¿Por qué las Familias Frenan la Llegada de Bebés?
Según Anif, la economía juega un papel crucial. El costo de vida elevado, como una soga que aprieta el presupuesto familiar, obliga a posponer o descartar la paternidad.
Las mujeres, ahora con más oportunidades laborales y educativas, ven la maternidad como un camino que a veces se cruza con sus metas profesionales.
Además, la sombra del cambio climático genera dudas sobre el futuro, llevando a algunos a replantearse la idea de traer más personas al planeta.
La pandemia, como un paréntesis de incertidumbre, también dejó su huella en las decisiones de formar familia.
¿Qué implicaciones económicas trae esta desaceleración demográfica?
La disminución de nacimientos no es solo un dato frío; tiene consecuencias palpables. Anif advierte que una fuerza laboral menguante podría frenar el crecimiento económico, como un motor al que le falta combustible.
Menos jóvenes trabajando podrían significar menos ahorro e inversión, como una alcancía que no se llena. El sistema de pensiones también tiembla ante un futuro con más jubilados que trabajadores activos, como una mesa con demasiadas patas viejas y pocas jóvenes que la sostengan.
¿Estamos caminando hacia un futuro económico más lento y con más desafíos?
¿Hay luz al final del túnel demográfico?
Incentivar la participación laboral de los adultos mayores, facilitar la conciliación entre trabajo y familia, ofrecer apoyos económicos a las familias y considerar la migración son algunas de las cartas que se barajan para mitigar los efectos de este envejecimiento poblacional.
¿Podrán estas medidas revertir la tendencia o al menos suavizar su impacto? Solo el tiempo lo dirá.
Por: Ricardo Collazos.