
Juan Diego Cano - Presidencia
Durante el acto de perdón público a la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, el presidente Gustavo Petro aseguró que algunas políticas internacionales están “literalmente asesinando a Colombia” y pidió a los países del norte global revisar su rol en la perpetuación de la violencia en América Latina.
El jefe de Estado afirmó que la violencia en Colombia no nace del pueblo, sino de decisiones foráneas que deben cambiarse. “La violencia colombiana no es el producto de nuestros corazones. El pueblo colombiano es un pueblo libertario”, dijo.
“La violencia entre los colombianos es un producto de decisiones extranjeras que no sirven, que hay que cambiar. La solidaridad de ustedes europeos y norteamericanos es quitar esas decisiones mundiales que hacen matar a los colombianos”, señaló.
Durante su intervención, el mandatario también se refirió al papel de las Fuerzas Armadas, afirmando que los soldados colombianos “no son para matar, son para hacer vivir”.
Agregó: “No quiero soldados matando soldados en el extranjero, ni en Ucrania, ni en el Medio Oriente, ni en México, ni en ninguna parte del mundo”.
El mandatario criticó el enfoque prohibicionista del narcotráfico, al señalar que el consumo masivo en países como Estados Unidos y en Europa ha elevado el precio de la cocaína, alimentado el negocio ilícito y causado una cadena de violencia que ya deja cerca de un millón de latinoamericanos asesinados.
“La cocaína, señores europeos, es producto de una prohibición que hacen con sus propios pueblos que son los que consumen eso en Estados Unidos y en Europa. La prohibición sube el precio, hace crecer la codicia y mata a colombianos y ahora mata a latinoamericanos. Va a un millón de muertos latinoamericanos asesinados por la codicia”.