El incidente ocurrió el 21 de agosto de 2025, durante la mañana, en la zona rural de Amalfi, Antioquia, en los límites con Anorí.
Un helicóptero Black Hawk de la Policía Nacional fue derribado mediante un dron cargado con explosivos mientras realizaba una operación de erradicación de cultivos de coca.
Inicialmente, se reportaron seis uniformados muertos y siete heridos, aunque algunas fuentes actualizadas mencionan hasta ocho fallecidos y ocho heridos.
El ataque fue atribuido por el presidente Gustavo Petro al Frente 36 del Estado Mayor Central (EMC), disidencias de las FARC que no se acogieron al acuerdo de paz de 2016.
Sin embargo, el ministro de Defensa inicialmente señaló al Clan del Golfo, un grupo armado que compite por el control de rutas de narcotráfico en la región, donde se reportan 110 hectáreas de cultivos de coca según monitoreo de la ONU.
La respuesta oficial incluyó despliegue aéreo y terrestre para neutralizar a los responsables y evacuar a los heridos.
Videos del momento del ataque circulan en redes, mostrando el impacto del dron en el helicóptero.
Este evento se enmarca en tensiones por la política de «paz total» del gobierno, y coincide con otros incidentes como explosiones en Cali cerca de una base aérea, sin detalles claros de víctimas.
Por: Ricardo Collazos.
Fuentes: Periódico El Colombiano y reportes periodísticos recientes.
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